En este artículo
- Los gatos tienen un cerebro pequeño
- El cerebro de un gato se parece mucho al de un humano
- La capacidad de inteligencia de un gato es similar a la de un niño de dos años
- Los gatos pueden reconocer voces y su propio nombre
- Los gatos sueñan
- Los gatos te miran para ver si se asustan o mantienen la calma
Los gatos tienen un cerebro pequeño
El cerebro de un gato tiene el tamaño de una nuez y representa el 0,91% de su masa corporal. En los humanos, el cerebro representa alrededor del 2,3%. Los científicos creen que, antes de ser domesticados, los gatos podían tener un cerebro más grande, ya que necesitaban estar constantemente atentos a cualquier amenaza a su alrededor. Sin embargo, incluso hoy en día, el cerebro de un gato tiene unos 250 millones de neuronas, menos que el de un perro (400-600 millones), pero impresionante para un cerebro del tamaño de una nuez.
El cerebro de un gato se parece mucho al de un humano
Al igual que nuestro propio cerebro, el cerebro de un gato incluye una corteza cerebral (para controlar las emociones, la memoria, etc.), cerebelo (para regular el movimiento y el equilibrio) y tronco encefálico (para regular funciones esenciales como la frecuencia cardiaca y la temperatura). Mientras que el cerebro de un gato madura por completo a los 12-18 meses de edad, en el caso de los humanos eso tarda en ocurrir hasta finales de la veintena.
La capacidad de inteligencia de un gato es similar a la de un niño de dos años
Los gatos están entre los animales con permanencia de objeto, lo que significa que entienden que sigues existiendo aunque no puedan verte, oírte u olerte. Nuestros felinos también poseen memoria a corto y largo plazo, lo que les permite recordar dónde acaban de colocar un snack o dónde ha estado su arenero durante años. Además, se cree que los gatos son capaces de detectar las emociones humanas y tienen cierta conciencia del tiempo y los números. ¡Sorprendente!
Los gatos pueden reconocer voces y su propio nombre
Por muy indiferente que parezca tu gato, los gatos saben cuándo les llama su dueño, ¡e incluso pueden reconocer su propio nombre! En lugar de vocalizar o mover la cola como los perros, los gatos suelen responder con gestos sutiles como girar la cabeza o girar las orejas, lo que se conoce como comportamiento de orientación. Así que, aunque no lo haga evidente, tu gato sabe que le estás llamando, sólo que decide no hacerte caso.
Los gatos sueñan
Las investigaciones sugieren que los gatos sueñan, como los humanos. Su ciclo de sueño incluye distintas fases, como el sueño de movimientos oculares rápidos («REM»), durante el cual es más probable que se produzcan los sueños. Durante esta fase, puedes notar que los ojos de tu gato se mueven por debajo de los párpados, junto con pequeños sonidos o movimientos. Así pues, si da patadas violentas durante la siesta, no suele haber por qué preocuparse: ¡sólo es el sueño en acción!
Los gatos te miran para ver si se asustan o mantienen la calma
Cuando un gato oye o ve algo que le asusta, puede mirar a su dueño para saber si ha llegado el momento de dejarse llevar por el pánico o no, un fenómeno llamado referencia social. Cuando tu gato observa que no te molesta el estruendo de un trueno, es probable que él mismo se sienta más tranquilo. Cuando, por el contrario, vea que entras en pánico, también lo hará.
